La mayor preocupación de cualquier padre y madre es que su hijo crezca sano y fuerte desde el momento que llega a su vida. Sin embargo, nuestro ritmo de vida no siempre nos permite tener unos hábitos saludables, ni hacia nosotros mismos ni con los más pequeños de la casa. Lo primero que debes tener en cuenta es que la bebida más sana que existe para los niños es el agua.
Durante la lactancia materna su fuente de hidratación es la leche, pero una vez que dejan de ser lactantes, el agua se convierte en la bebida más saludable para el resto de su vida. Desde Ordessa te queremos enseñar cómo tus hijos pueden estar más sanos modificando algunos hábitos de nuestro día a día.
La hidratación en niños
¿Cuánta agua debe tomar un niño?
Los litros de agua que debe tomar un niño se determinan en términos generales por la edad. Si nos remitimos a los valores aportados por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), en condiciones de temperatura ambiental y de actividad física moderada, los infantes deberían tomar las siguientes cantidades de agua (incluyendo la de la humedad de los alimentos):
La cantidad de agua en bebés lactantes en el primer año de vida
Como recuerda la Asociación Española de Pediatría (AEP), antes de los 6 meses, el bebé que toma solamente leche materna y a demanda no necesita agua ni otros líquidos. De hecho, “en edades la ingesta de agua recomendada se estima en 0,7 litros al día que se consigue de sobra con la lactancia materna establecida, ya que de media se ingiere unos 0,78 litros al día y el 87% de la leche humana es agua”, como cita el organismo.
A partir del medio año de vida, si ya toma otros alimentos además del pecho, la AEP recomienda ofrecerle agua en vaso de vez en cuando y enfatiza en que no se debe ofrecer agua ni otros líquidos directamente de la botella.
¿Cuánta agua debe tomar un niño de 2 años?
Para el segundo año de vida la EFSA determina una ingesta total de agua de 1100-1200 ml/día por interpolación, ya que no dispone de datos de ingesta.
Hidratación en niños de 2-3 años
Para los niños y niñas de 2-3 años lo determina en 1300 ml/día.
Hidratación en niños de 4-8 años
1600 ml/día para los niños y niñas de 4-8 años.
Consumo de agua en 9-13 años
En estas edades la clasificación empieza a distinguir por sexos: 2100 ml/día para los niños y 1900 para las niñas.
Consumo de agua en adolescentes de 14 años
A partir de esta edad su consumo puede empezar a adecuarse al de los adultos, es decir, aproximadamente 2 litros para las mujeres y 2,5 para los hombres. Si quieres saber más sobre este asunto, en este post hablamos sobre cuánta agua deben consumir los adultos.
Como en los adultos, la hidratación en pediatría depende de la edad, el peso y la altura, el clima o de si realiza ejercicio físico o no.
Hábitos de vida saludable para niños
· Beber agua de calidad
Los niños queman más calorías que los adultos ya que su actividad física es intensa desde que se levantan hasta que se acuestan. Por eso, es necesario que se hidraten con agua y que lleven siempre una botella accesible.
Pero no debemos conformarnos con que los niños beban cualquier tipo de agua, sino que es necesario que sea de calidad. En Ordessa te proponemos diferentes soluciones para disponer de un agua depurada y de calidad en tu hogar para que no tengas que volver a preocuparte por el tipo de agua que consume tu familia: descalcificadores, filtros, fuentes, grifos, ósmosis…
· Cantidad de agua que debe beber un niño
Como hemos comentado, no solo importa la calidad de agua consumida, sino que es imprescindible que los padres controlen la cantidad que beben a lo largo del día. En los adultos se recomiendan unos dos litros al día, pero la mayoría no suele llegar a realizar ese consumo.
Hasta los 10 años, hay que intentar que el niño beba entre un litro y litro y medio a lo largo del día, y cuando es más mayor, dos litros como un adulto. Para que estén sanos debemos acostumbrarles a que beban agua incluso cuando no tengan sed, y a incorporarla en la alimentación acompañando cualquier comida. Un almuerzo o merienda saludable debe contener agua, por encima de batidos o yogures líquidos que contienen alto contenido en azúcares. Es importante recordar a los niños más pequeños cuándo tienen que beber agua, especialmente en verano, para evitar las consecuencias de una deshidratación.
· Tomar fruta cada día
Otra forma de hidratarnos, y a la vez saciar el apetito de forma saludable, es con la fruta, uno de los alimentos imprescindibles para una nutrición sana. Pero para muchos padres, conseguir que sus hijos coman fruta cada día se convierte en una pelea constante. Una solución para muchos es consumirla en zumo, aunque seguro que has oído que exprimida o batida pierde sus propiedades. Como en Ordessa estamos comprometidos con los hábitos de vida saludables, te proponemos el “slow juice”, un revolucionario sistema de extracción de jugo de fruta. Los alimentos se exprimen lentamente y a una temperatura que evita que el zumo se oxide o pierda su valor nutricional.
Promover hábitos saludables con Ordessa
El agua es nuestra fuente principal de vida y muchas veces descuidamos su calidad. Para que un niño crezca de forma saludable es muy importante evitar en el hogar los problemas más habituales que nos encontramos: dureza, agua turbia, cloro, bacterias… No dudes en ponerte en contacto con nosotros para que podamos comentarte todas las soluciones que tenemos para que los niños estén más sanos con un consumo de agua de calidad.