Cuidarnos y llevar buenos hábitos de vida es algo que debemos comenzar desde la infancia, esto evitará o disminuirá las probabilidades de sufrir en un futuro problemas de salud.
Uno de los percances que podemos tener a medida que vamos creciendo son las piedras en los riñones, también conocidos como cálculos renales.
¿Qué son las piedras en los riñones?
Pequeños trozos sólidos de material que se forman en esos órganos del cuerpo, y se producen por determinadas sustancias en nuestra orina.
Son muy dolorosas, de hecho es una causa de ingreso en centros hospitalarios. Para evitar todo este tipo de enfermedades hay que seguir las recomendaciones de los médicos.
Estos profesionales nos aconsejan de que bebamos alrededor de dos litros de agua al día, aunque está cantidad dependerá de la época del año o del esfuerzo físico que se haga durante el día.
No todas las aguas son iguales, la diferencia entre unas y otras son los componentes que tienen. De hecho, la calidad del agua dependerá de esos elementos minerales.
Si queremos cuidar nuestra salud, o evitar que nuestro estado físico vaya a peor en el caso de tener alguna enfermedad nefrítica, lo primero que hay que fijarse es en esos componentes.
Es muy recomendable vigilar la calidad del agua que bebemos durante el día, en las siguientes líneas vamos a explicar cómo los minerales influyen en los riñones.
Composición del agua: factor clave para la salud de nuestros riñones
Una buena hidratación es indispensable para nuestra salud, en especial, es vital para nuestros riñones.
En el caso de no beber la cantidad suficiente de agua aumentan las posibilidades de sufrir dolencias y la aparición de problemas renales.
Por supuesto que en el caso de tener alguna enfermedad nefrítica empeorará la situación.
De ahí la importancia aquellas personas que tengan problemas renales en beber agua de la mejor calidad posible.
La clave es beber agua que contengan pocos minerales y sales, que no sea agua muy dura. Tiene que ser agua de mineralización muy débil y diurética.
Otros hábitos que dañan los riñones
Altos niveles de sodio en las comidas o en el agua pueden afectar nuestros riñones con el paso de tiempo.
Hay otra serie de compuestos que también dañan el riñón como son las bebidas azucaradas o un consumo excesivo de cafeína, ya que aumentan la presión arterial y la tensión que inciden indirectamente el funcionamiento del riñón.
La ingesta abusiva de medicación sin control médico, como puede ser tomar analgésicos sin receta médica que pueden crear efectos secundarios que influyen directamente los riñones ocasionando daños en ellos.
También las bebidas alcohólicas en exceso y con un consumo prolongado a lo largo del tiempo también afectan a estos órganos.
De hecho, las toxinas y los componentes químicos de este tipo de bebidas son muy peligrosos.
Otro de los hábitos qué podemos llegar a cometer en nuestro día a día, y que son realmente malos es no miccionar con frecuencia y aguantar mucho rato.
Hábitos de ese estilo pueden llegar a provocar insuficiencia renal incontinencia con el paso de los años.